martes, 20 de noviembre de 2018

SIGUE LA AGONÍA DE FRANCO

La noche de autos
La llamada de teléfono más esperada llegaría el 19 de noviembre a las 10 de la noche. "Vicente Pozuelo nos dijo que nos preparásemos para salir hacia La Paz en cuanto recibiéramos otra llamada", recuerda Piga. El segundo telefonazo llegó exactamente a las 00.00 horas del 20 de noviembre. Llegaron al hospital media hora después y tras sortear a la prensa por la puerta de atrás.
Igual pensaban que anunciando la muerte de madrugada amortiguaban su impacto y mitigaban las posibles protestas, ya que le pillaría a casi todo el mundo en la cama
Cuando entraron en la habitación de Franco (00.40 horas), se llevaron la primera sorpresa: nada hacía indicar que allí hubiera muerto alguien hacía pocos minutos, sino más bien hacía unas horas. "La habitación estaba vacía, libre de aparatos, y Franco estaba desnudo sobre la cama cubierto con una sábana. Habían sacado de la habitación todo lo que se podía sacar más allá de lo estructural de cualquier habitación de hospital", aclara Piga. Ni rastro de los aparatos que habían mantenido con vida a Franco durante su larga agonía.
"Nos quedamos allí los cuatros solos". O sea, Antonio Piga, su padre, el doctor Modesto Martínez-Piñeiro, antiguo director del Instituto Anatómico Forense, y Antonio Haro Espín, especialista en anatomía y embalsamamientos.


El acta notarial del fallecimiento de Franco aseguró lo siguiente: "Su Excelencia el Jefe del Estado, Don Francisco Franco Bahamonde, ha fallecido en la Residencia Sanitaria de la Paz de la Seguridad Social, de Madrid, a las cinco horas y veinticinco minutos del día veinte de noviembre por parada cardíaca, como episodio final de un shock tóxico por peritonitis. […] Firmado: Doctor Vicente Pozuelo Escudero". El acta estaba firmada por, entre otros, el Presidente del Gobierno (Carlos Arias Navarro). La segunda diligencia fue firmada por el Príncipe de España, Juan Carlos de Borbón y Borbón.

Los partidarios de tener el régimen franquista para toda la vida, alargaron la agonía del moribundo hasta limites crueles e inhumanos. Parece que los han conseguido 43 años después.

En una ocasión, en pleno declive del franquismo, me recomendaron no tirar las revistas de contenido político con la afirmación "dentro de unos cuantos años estas revistas estarán de actualidad".  Han pasado 43 años de la muerte 'física' del dictador y ahora mismo está más presente en nuestras vidas que hace 20.  


Empecemos por qué Franco 'designó' a su sucesor y su sucesor no tuvo la decencia, dado el origen de su designación, proclamó su adhesión al régimen nacido el 18 de julio de 1936, de consultar a los españoles si aceptábamos su designación por el dictador.  Lo designó para que todo siguiera igual, "algo tiene que cambiar si queremos que todo siga igual (algo tiene que cambiar para que nada cambie, Lampedusa)" Para que los de siempre siguieran mandando.  No vale decir, por tramposo, que la Constitución reconoció al sucesor cono legitimo Jefe del Estado, porque eso es hacer trampas.  En la constitución se da por hecho lo que no era verdad, porque se nos hurtó el referéndum de si queríamos monarquía o República, porque salia favorable a la República, como confesó Adolfo Suarez años más tarde.

En la transición no se tocó un pelo a ningún franquista acodado en los enchufes del franquismo.  Es más, se inventaron la AIS para colocar y mejorar a los enchufados que habían obtenido una <<oposición>>, con el enchufe de su papá, para ser ascendidos de categoría. Y los que no la tenían se la regalaron mediante un paripé de funcionarización La agonía del franquismo seguía dando sus frutos.

Llegó Felipe Gonzalez con sus 202 diputados y colocó a los suyos en los puestos de los otros, pero como tenían una oposición siguieron cobrando tan ricamente. El caso del torturador Bily el Niño es un claro ejemplo de lo que digo.  Ahora le quieren quitar lo que le tenían que haber quitado hace 43 años. 

Ahora, 43 años después, quieren sacar a Franco de donde no debió haber sido enterrado nunca, junto a sus victimas.  Fue enterrado  en el Valle de los Caídos por el expreso deseo de su <<Sucesor a  titulo de rey>> Juan Carlos I como Jefe del Estado.


En los últimos días de la agonía de Franco, nos mintieron hasta en la hora y el día de la muerte y, así lo corrobora el doctor forense Antonio Piga  que afirma "Cuando lo embalsamé, llevaba varias horas muerto". Hasta con eso nos engañaron.  Hasta con la fecha y hora de su muerte nos mintieron, todo era por prorrogar al presidente de las Cortes y no renovarlo por otro menos afín a sus intereses.

Hoy, 43 años de la fecha oficial del fallecimiento se siguen haciendo actos de exaltación a su memoria, parece como si la agonía no hubiera terminado. El franquismo sigue vivo, que se lo pregunten a Pablo Casado.




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