"YO LE VENDO LAS ARMAS LO QUE HAGA USTED CON ELLAS NO ES MI RESPONSABILIDAD" BONITO EJERCICIO DE HIPOCRESÍA. |
¡Que las armas no son buenas, que hacen daño y que acaban por matar!. Incluso las que vendemos los españoles a los Saudies, señor Borrel y señor Sánchez presidente del Gobierno.
Ya se lo decía el genial Miguel Gila al "enemigo" : "han dado a una señora que no es de la guerra y está con un morro". Por eso Borrel nos ha dicho, con su elocuencia jacobina "estas armas no causan daños colaterales". Bueno, ¿pero matan? que diría Gila. Matar, lo que se dice matar, sí que matan, pero solo a los malos, que diría Borrel.
El presidente Sánchez es que ha sido y será un 'paquete'. Le ha tocado en suerte que M. Rajoy se enfrentó a más de la mitad del Congreso y él aprovecho "una ocasión que creyó propicia y obvia" que diría don Mendo, y sacó una Moción de Censura adelante. La cuestión es que si no cambian las formas, estos no se comen el turrón en La Moncloa.
Margarita Robles, no la vamos a descubrir ahora, fue desautorizada por Sánchez, pero ella como si nada. Borrel, ya le conocemos sus argumentos sobre Cataluña, pero desde hace muchos años de cuando le pusieron de presidente del Parlamento Europeo, ya entonces demostró su animadversión al catalanismo. Este pollo va de superior y hay que recordarle varias cosas y por su orden. 1º Convirtió la Agencia Tributaria en la Gestapo. 2º Siendo ministro de Obras Publicas, 1991-1996, tuvo bloqueada la variante de Contreras en la carretera de Valencia sin importarle lo más mínimo los muertos que se producían en este peligro tramo de carreteras. Fue tan cruel, que organizó una visita desde el aire en un helicóptero en el que subió a alcaldes y a la delegada del Gobierno de Valencia, para que con la excusa de enseñarles los valores ecológicos de la zona "echaran la primera papilla y al bajar a tierra con el mal cuerpo consiguiente firmaran su renuncia a las obras". Fue llegar en el 96 el PP al Gobierno y, con Bono de Presidente de Castilla la Mancha, socialista, y se firmó el comienzo del obras inmediatamente. Este mismo pollo nos quiere convencer que las bombas que España les vende a los genocidas saudíes no matan. Son de besos, no te jode.
Ya sabemos que si no les vendemos unas bombas a los saudíes, que ya habían sido pagadas incluso al Gobierno de M. Rajoy, no nos compran las fragatas que dan trabajo a los de Cadiz. Ya lo sabemos, pero Alemania y otros no le venden armas a los saudíes para que masacren a los civiles del Yemen. Será, porque como decía Montoro, "¡señorías, no tenemos dinero para pagar a los funcionarios!. Pues entonces nos tragamos todos los sapos y vendemos lo que sea con tal de dar trabajo a ese sector. ¡Joder, no fueron tan sensibles con los mineros!
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