jueves, 10 de enero de 2019

EL CINISMO REPUGNANTE Y DESCARADO DE JOSÉ MARÍA AZNAR

AZNAR EL TRILERO

José María Aznar es de un cinismo insultante. En una entrevista de radio afirmó que FAES, fundación suya que le promociona por todo el mundo, era un fundación particular que no recibía dinero del Estado. Hemos sabido que el Gobierno de Mariano  Rajoy, M. Rajoy para entendernos, en plena etapa de recortes en Sanidad, Educación y Pensiones  regaló seis millones de euros a FAES. Muy mal por parte de M.  Rajoy, aunque eso de pagar a propios con dinero de todos era lo habitual y, peor por Aznar que vuelve a mentir al decir que su financiación era de particulares. Aznar es un cínico perpetuo.

Aznar ha pasado a la historia por mentir. Mintió con la escandalosa versión de los atentados del 11-M en Madrid, quiso engañar al mundo con una versión que se le cayó de las manos a las pocas horas. Miente cuando dice que España no participó en la guerra de Irak, cuando hubo soldados y victimas en Irak. Se creyó Dios y que solo tenía que dar cuentas a  la historia. Fue el responsable de las matanzas del 11-M de Madrid, y con eso tiene que cargar toda su vida.

Es el único que no ha pedido perdón por la guerra de Irak, él nunca pedirá perdón por nada. Tiene un sonrisa falsa y desagradable, es repugnante verle mentir. En la comisión del Congreso por el 11-M tuvo la desfachatez de hacer alusión a "lejanos desiertos" en tomo jocoso a la autoría intelectual, sí autoría intelectual de los atentados. Muletilla que se sacaron de la manga los fachas para desviar lo evidente "los atentados del 11-M fue una venganza por la participación de España en la guerra de Irak". Tuvimos el desagradable espectáculo de ver como una parte de la prensa ,Pedro J. Ramirez, Federico J. Losantos , Inda y otros de la misma calaña se inventaron una historia como que la policía tenía congelados unos muertos y los llevó a la casa de Leganes para hacer ver que se habían, suicidado. Es una historia que solo unos dementes son capaces de urdir con tal de no reconocer la verdad "fueron los moritos de Lavapies" mal que le pese a Juan Ignacio del Burgo, que escribió un libro plagado de mentiras para exculpar a su señorito Aznar.

Aznar es cínico persecutorio y nos trata a los ciudadanos como imbéciles, como "dos que duermen en el mismo colchón son de la misma condición, Ana Botella, su mujer, vendió a los fondos buitres miles de pisos que eran de protección oficial". Ya se nota que todo se pega menos la hermosura. 

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