sábado, 29 de diciembre de 2018

TELEBASURA ES MARCA ESPAÑA

SACAR LO MENUDILLOS DE ALGUIEN ES MONEDA DE ÉXITO SEGURO

Forges, ¡cuanto te añoramos!, decía  y se lamentaba de lo poco qué se puede esperar de un País qué tiene como primera opción en su mando de la televisión a la  cadena de la telebasura.  No daba el nombre pero todos pensamos en la misma. Puedo decir que un muchas casas la unica cadena que ven es en la que están los Kikos, La Mila, los Matamoros y un largo etcétera de finos e ilustrados comentaristas.

Si no hay conflicto se lo inventan, el caso es estar muchas horas despellejando a alguien.  Luego ese alguien va al plató, cobrando naturalmente, y se pueden pasar una semana con el tema de, da lo mismo, pero lo que más tirón tiene son los cuernos. El tema de hablar mal del ex o la ex tiene mucha audiencia.  

Hace años un experto en publicidad me dijo "un anuncio que no pega se retira inmediatamente" y, sobre los programas de telebasura me dijo "los estudios de audiencia nos dicen donde hay que poner publicidad, nunca en programas de baja audiencia". Está claro que la primera cadena de audiencia es la 5, los inversores saben donde ponen su dinero y, si apuestan por la 5 es porque la ve la mayoría y es ahí donde hay que poner la publicidad. La publicidad es una ciencia muy seria y científica. No se anuncia lo mismo en una cadena local que en una de ámbito estatal. Cambia el modelo según la hora y el tipo de cliente. A la hora de la telebasura se publicitan pocas enciclopedias, hay que ajustar el producto según la clientela.

Un caso digno de mención fue la venta de cacerolas y sartenes promocionadas por Belén Esteban. ¡Se acabaron todas,! hubo que hacer nuevas remesas ante la demanda ,no era por la calidad, era por la Belén Esteban. La misma que vendió un libro de su vida, que no había escrito ella, por supuesto, pero el morbo de  saber lo que contaba llevo a miles de personas a comprar su libro. Muchas  que lo compraron no habrán leído ni el prologo, pero lo habrán puesto en un lugar importante de la casa para que cuando vengan las visitas sepan con quien están hablando.


Una conocida vive en una vivienda de 80 metros, son dos personas y tiene tres televisiones, su programa favorito es Sálvame, se lo pone en vena y se conoce la vida y milagros de toda la fauna del 'cuerneo'.  Otra conocida también le pega duro al Sálvame, su marido se lo reprocha y ella se defiende con "me hacen mucha compañía".  Ese es el éxito, la compañía a los que se sienten solos. 

No lo digo como reproche a nadie, desde que se inventó el mando a distancia y hay tantas cadenas de televisión cada cual es muy dueño de suicidarse como quiera. Esto, luego se traduce en los resultados de las elecciones.

Lo más significativo de este fenómeno es que ha calado en jóvenes de 14 y 15 años.  En el autobús escuché ésta conversación entre dos jóvenes de 14 o 15 años :"yo me paso las tardes viendo el Sálvame, me encanta", le decía uno al otro. Eran chicos.  Los modos y maneras del Sálvame, pegar gritos interrumpir al que está hablando, vamos, lo más granado de la mala educación, se está copiando por mucha gente, esto sí es grave.


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