VIVIR DEL CUENTO

CORDERO ASADO EN CAZUELA DE BARRO

De un tiempo a esta parte es muy habitual encontrarnos con gente que "vive del cuento".  Ahora la moda es la gastronomía. Aquí el más tonto es un fino catador de vinos y un consumado gastrónomo. Se adornan con sus conocimientos culinarios, que en la mayoría de los casos hacen aguas por todas partes.

Esta mañana en el programa de RNE "No es un día cualquiera" que dirige Pepa Fernandez, ha intervenido un tal Rafa García Santos, habla con voz de quien domina el tema y va de sobrado.  Dejaré aparte la disertación que no ha dado sobre las rabas del calamar, un aburrimiento total. Me centraré en la forma que ha recomendado hacer un cordero asado.  Ha empezado denostando el cordero castellano por su origen no nacional.  Le digo "usted no conoce el cordero de Sacramenia, Segovia, y por eso habla así".  Su receta de elaboración del cordero asado tiene bastantes fallos garrafales, veamos : desprecia el horno de leña por el horno moderno. No todo el mundo puede tener un horno de leña en su casa, pero despreciarlo me parece muy soberbio fruto de la ignorancia como he podido comprobar.  Recomienda usar una bandeja de horno y ni se menciona la cazuela de barro.  Esto es de cero patatero.  Dice de poner el cordero sobre agua en la bandeja y no menciona ni por asomo poner unos palos de sarmiento o unas simples cucharas de palo con el fin que el cordero no este en el agua. Todas estas ignorancias le sirven a este individuo para tener un micrófono en una emisora como RNE.

Con la gastronomía nos ha pasado como con todo en una sociedad que se ha hecho nueva rica y sabe de todo y no sabe de nada.  Todos los que han pisado un asador se consideran asadores y si lo pones en plan de periodista lo vende como un fino conocedor. Me comentó un restaurador de cierto prestigio que en más de una ocasión ha tenido problemas para cobrar la cuenta a un cliente que se presentó como comentarista de gastronomía y pretendía no pagar la cuenta.  Los hay que presumen de colaboradores de programas de gran audiencia y viven del cuento de la repercusión que tienen sus opiniones.

Después de oír esta mañana en RNE en el programa de Pepa Fernandez al comentarista Rafa García Santos, ya sé lo que  tengo que hacer, cambiar de emisora. Hablo desde la experiencia de más 50 años asando corderos.