APOSTAMOS POR LA GASTRONOMÍA, LAS TAPAS, EL CORONAVIRUS SE LO LLEVA POR DELANTE

JUGAMOS TODO AL MISMO NUMERO: TAPAS Y BARES

Desde hace unos años muchos de los que tenían dinero sobrante o prestado y con fama,  invirtieron en "gastro bares" que es un bar con pretensiones al  que iban los pijos de la zona. Tenemos inversionistas  del más variado pelaje y condición: putas recicladas a comentaristas en los platós de televisión, previamente parejas de concejales corruptos, como,  afamados toreros retirados que hacían comandita con comentaristas de radio, antes de televisión que lo cerraron por su ínfima audiencia, que presumen de saber de cocina y calidades de productos lo que no está en los escritos. Pero todo es farfolla, pura posé para epatar a los pijos de la zona que quedaban a tomar el aperitivo en (aquí viene el nombre de la interfecta o interfecto) y se veían los de "su clase" como dicen los de "esa clase". Tenían modos y maneras muy típicos de buenos catadores del producto selecto, solo lo más selecto. Aunque luego decían  qué lo que más les gustaba era un "buen puchero". Lo decían mientras pelaban con inigualable estilo unos langostinos  de San Lucar, como para hacerse humanos y demostrar que ellos se hacían a todo.

Ha sido el gran negocio, junto con los bares de copas. Famosos, famosillos y famosetes, ponían un bar copas. La lista es interminable. Bueno, pues el coronavirus se lo ha llevado todo por delante. Desde el afamado Cándido de Segovia al humilde bar de la esquina que daba el menú al trabajador de la zona, todos han tenido que cerrar y ya veremos como capean el temporal.

España ha apostado todo al mismo numero: El turismo y la hostelería. Ningún manual de economía tiene previsto una situación, mundial, como la presente. Se ha parado todo lo relacionado con el turismo y las copichuelas. Ya no podemos tomarnos unas gambas en la Cervecería de Santa Barbara, a la que  iba desde hace más 50 años. Se acabaron los buñuelos de bacalao de Casa Labra o Revuelta, ésta es una tasca de toda la vida que había colas inmensas para entrar, todo se lo he llevado el dichoso coronavirus.

Este tipo de tragedias se lleva por delante a los gilipollas y a los honrados. Los gilipollas se quedaran arruinados para toda su vida y los honrados sacaran la cabeza a flote porque son profesionales y tiene "cuajo" para aguantar.

A ver si aprendemos a no poner todos los huevos en la misma cesta. Lo rápido y lo inmediato es para especuladores, qué es lo qué somos. Puros especuladores.