domingo, 8 de diciembre de 2019

SOBRE LA CUMBRE DEL CLIMA EN MADRID

EL DE IBERDROLA EN LA COP25. ¡JODER QUE MORRO!

Hace años se celebró un acto contra el consumo de drogas, lo presentó Ramoncin. Un tiempo después el mismo Ramoncin dijo públicamente: "mas del cincuenta por ciento de los que subieron al escenario para criticar el consumo de drogas, eran consumidores habituales de drogas".


El 'greenwashing' en la COP25: grandes empresas contaminadoras cuelan su discurso en la cumbre climática


  • Las principales compañías energéticas del país hacen acto de presencia en la cumbre del clima patrocinando el encuentro, con publicidad, con 'stands' propios y con participación en coloquios organizados en el espacio de España
  • Endesa, la empresa más contaminante del país, cuenta con un puesto en la zona verde donde defienden que la compañía y la biodiversidad tienen una "estrecha relación"

Esto es lo habitual, las grandes compañías contaminadoras quieren lavar su imagen estando presentes en las cumbres climáticas. 

La mayor desvergüenza se da cuando un país rico y contaminante le compra la tasa de contaminación a otro país pobre que no contamina. Es como decir: "yo como soy rico puedo contaminar lo mío y lo de los que no contaminan". Esto se está haciendo todos los días con la mayor tranquilidad y transparencia.

Estamos, ahora, muy sensibilizados con 'el calentamiento global y los mares de plástico', hay que hacer algo, por ejemplo :"¿volver al botijo y a envolver el bocadillo en papel de periódico?". No hace tanto que lo hacíamos. Que ya se nos ha olvidado todo. Si la tierra se ha calentado es porque la hemos calentado. En aras de la comodidad ponemos el aire acondicionado. Que para eso lo puedo pagar. El que venga detrás que arree, se ha dicho siempre.

Compramos productos a sabiendas que son de países con esclavitud humana para fabricarlos. Lease la novela de Saviano, Gomorra. Ayer han muerto casi cincuenta personas en un incendio en una fabrica en Nueva Delhi. Los trabajadores estaban durmiendo en la fabrica y las condiciones de vida eran espantosas. Pero, qué importa esas vidas de miserables, lo que importa es que trabajan por dos  dolares al día fabricando bolsos para que se vendan en está parte del mundo que no quiere el abanico en verano y que contamina más que en toda la historia de la humanidad.

Somos un putos nuevos ricos. Casi con seguridad que acabamos mal y antes de lo previsto. De nada sirven las manifestaciones de jóvenes pidiendo "salvemos la tierra" si luego somos una sociedad emborrachada por el consumo sin pensar en donde se hace el producto que compramos.


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