sábado, 30 de noviembre de 2019

PLACIDO DOMINGO LO LLAMA GALANTERIA. ¡JODER QUE MORRO!

PLACIDO DOMINGO "EL GALANTE"
Toda nuestra literatura y la las demás también, están llenas de señores galantes que lo que pretendían era llevarse "al huerto" a la moza de turno. Don Juan, eres un don Juan, se le decían al conquistador. Era como meritorio apuntarse conquistas. Estaba bien visto incluso por las mujeres. ¿Eran otros tiempos? Claro que sí, pero la cuestión es :¿la mujer cedía a las pretensiones del hombre porque se sentía atraída o se sentía forzada?. En el primer caso nada hay que objetar. la mujeres siempre han desplegado sus "armas de mujer" para hacer sus conquistas, temporales o con pretensiones definitivas como el matrimonio. Pero cuando existe el mínimo, por pequeño que sea, un condicionante sobre la voluntad de la mujer, "si no pasas por el aro no hay contrato, si eres amable yo lo seré contigo" y ,un largo etcétera de quien tenía poder o mando. Desde el encargado de una tienda hasta el político influyente, o sin ser político el miembro de un tribunal de oposiciones que se estaba tirando a una opositora en el mismo Instituto que se hacía la Oposición, naturalmente la opositora que se "abrió o se ofreció" aprobó y con buen número. 

En el mundo de la farándula se movían en un ambiente mucho más liberal que el resto de la sociedad. Una primera figura tenía mucha capacidad de decisión sobre repartos de espectáculos. En los años 50 yo conocí a destacadas figuras del espectáculo, todas mujeres a las que vestía mi madre que era modista. Las confidencias que le hicieron a mi madre son las que me dan pie para decir que si un productor se encaprichaba de una joven agraciada tenía dos posibilidades "ceder" o dedicarse a trabajar fuera de la farándula.
En una pelicula de epoca de pricio del siglo XX un viejo se encapricha de una joven adolescente, el razonamiento de la madre para convencer a la niña es demoledor: "total, algún día tiene que ser y ahora don ...., nos ayuda  y todas viviremos mejor, más adelante encontraras el amor"

En el caso de Placido Domingo yo no he estado con la vela alumbrando sus conquistas, pero decir ahora que en aquella época era distinto y que lo suyo era pura galantería suena como a tomadura de pelo. En aquella época y en todas, la situación de inferioridad crea y propicia el abuso. Tengo muy presente los abusos de mandos militares a mujeres y a hombres.

En una ocasión escuché a un profesor de secundaria contar por la radio su problema con las adolescentes. Decía: "se me restriegan y me enseñan los pechos dentro de clase, yo ahora tengo un problema muy gordo, una chica de 16 años, está embarazada y yo estoy casado y no sé que hacer". La situación era dramática, a mi lo único que se me ocurrió pensar es "tú eres el adulto y el formado, ella es una adolescente de la tú te has aprovechado", eres un cabrón sin paliativos.

Las ocasiones siempre han existido, en todos los ambientes y en todas las clases sociales, la cuestión era quien las quería aprovechar y quien abusaba de su condición, tipo "señorito con joven criada", hay casos para aburrir. la literatura está llena de estos y seguirá llenándose. 

Lo miserable es el abusar de una posición de poder y llamarlo galantería. De galantería nada.

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