En Murcia estamos asistiendo a la ceremonia de la "negación", que consiste en negar lo dicho y lo firmado. El presidente Pedro Antonio Sánchez necesitaba los votos de Ciudadanos y estos pusieron como condición sine qua non :que la imputación de un miembro del la Comunidad seria causa de dimisión. Ahora Maillo, hombre fuerte del PP , dice que fueron lentejas y que Pedro Antonio Sánchez no dimite hasta que no "haya juicio oral", y ya puestos a no cumplir lo firmado porque no decir <hasta que no se resuelva en caso en el Supremo, o en el Constitucional>, quien sabe si no más lejos. Ya puestos.
El mismo Pedro Antonio Sánchez declaró públicamente, y así está recogido, "si fuera imputado dimitiré", año 2015 cuando se destapó el escándalo. Lo de Murcia pone de evidencia que la palabra de un político no vale nada. Y esto es muy grave, porque un politico es su compromiso y su cumplimiento. Y si no es así, no valen para representar a los ciudadanos.
El Partido Popular es una partido corrupto que pasó la investidura gracias a un pacto anti corrupción que firmó con C´s, ademas del suicidio del PSOE. Pero, y esto es muy importante "sin el pacto con C´s" no hubiera sido posible la investidura de Rajoy.
Rajoy y el PP actuan como lo hacían en la legislatura de 2011-2015, como si tuvieran mayoría absoluta, y le recuerdo que tienen 137 diputados propios y que todos los demás son prestados, hasta 176 le faltan muchos.
El antecesor en el cargo en Murcia, Alberto Garre, denuncia que él ya informó a Rajoy y Cospedal del escándalo que se iba a producir y pese a saberlo no han hecho nada.Garre, que también es presidente del Comité de Derechos y Garantías del PP en la región, asegura que el actual presidente "y quienes le apoyan desde Madrid nos han metido en la crisis institucional más grave de los últimos años". Es, a su juicio, "un carnaval político" en una autonomía "que lleva meses paralizada y escandalizada".
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| PEDRO A. SÁNCHEZ, NI CUMPLE SU PALABRA NI DIMITE. |
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