sábado, 2 de junio de 2018

POR ALGO SE EMPIEZA. SIN CRUCIFIJO NI BIBLIA

TIENE QUE EMPEZAR UNA NUEVA ETAPA, EMPEZANDO POR LAS FORMAS.


Empezar con buen pie. Suprimir el crucifijo y la Biblia.

Mucho se ha tardado en suprimir símbolos impropios de un estado aconfesional.  Lo siguiente es suprimir la reverencia que hacen las mujeres al Rey. Es un rito medieval impropio de un Estado moderno y en el que somos "ciudadanos que no súbditos". Eso de súbditos es propio de monarquías medievales con derecho de pernada y otros similares. Ahora el derecho de pernada lo tiene el contratador de mujeres. Es un hecho sabido pero no suficientemente denunciado. Lo tenemos aquí y en todo el mundo. Una lacra social de la que no se salva nadie.

Sigamos con el nuevo presidente del Gobierno. La televisión necesita una cuchilla que baje lo suficiente como para eliminar a todos los Dávila, insolvente y faccioso, Carmenes Tomas y similares, Graciano Palomo, el repugnante sabe lo todo Chani, Sergio Martín, el de Informe (mejor deforme) semanal, el miserable Javier Cardenas y, toda la tropa de secuaces al servicio del PP, que no de la informaciónimparcial.

Cuando se toma partido, se toma hasta mancarse, cuando cambia el viento te apartan y te pones al pairo. Cuando ganó el PP la limpieza fue descarada.Entraron en TVE la carcundia de los tiempos de Aznar, quitaron a magníficos profesionales y como en el caso de Castilla la Mancha, pusieron a auténticos indeseables y manipuldrores. En informativos está el sectario mayor del Reino, Agudin, procedente de La Razón, que ha arrasado con el rigor informativo de los telediarios. Hay que actuar rápido.

Hay que dar trabajo a la GACETA, BOE, y derogar todo lo indeseable de Rajoy, Ley Mordaza la primera, modificar el Código Penal y suprimir el delito de odio, verdadero engendro judicial, derogar la Reforma Laboral que ha arruinado a la clase trabajadora.

Sánchez tiene trabajo por delante. Miedo me da las veleidades de Podemos. Atentos. 


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