Resulta muy preocupante que las juventudes de las CUP adopten modos y maneras que eran los mismos en la Alemania Nazi. La propuesta de "señalar-delatar" al que no se siente independentista es más que suficiente para desacreditar a sus autores.
Si esto es lo que quieren el "llorón" de Junqueras y el "bien mandao", de Puigdemont, mandado por el cobarde de Artur Mas, los catalanes decentes, independentistas o no, deben callarlos y expulsarlos. Cataluña no se merece que una cuadrilla de "matones" campe a sus anchas en la política.
Recientemente tuvimos a los descerebrados de HB en Euskadi, empleaban la misma metodología Nazi que emplean ahora los de Arran. Lo hacían porque a otros partidos políticos le venía de perlas estas actuaciones. Hasta que le tocó enterrar a uno de los suyos. ¡Cuanta miseria adorna al ser humano!.
En este caso de Cataluña se decía "son separatistas pero no hay una ETA". Al paso que van los de ARRAN, poco les falta. Al tiempo.
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