domingo, 16 de agosto de 2020

CONTRA LA PANDEMIA ORACIÓN, PERO CON DEVOCIÓN CARDENAL CAÑIZARES

NI VACUNA NI HOSTIAS, LO QUE HAY QUE HACER ES REZAR

El cardenal Cañizares duda de la ciencia como solución al coronavirus: "No es suficiente"

El clérigo señala que "la verdadera esperanza" es Dios

El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, ha asegurado este sábado, durante la misa en la fiesta de la Asunción de la Virgen María, que "la ciencia y la técnica no son suficientes" ante la pandemia y "la verdadera esperanza ante la pandemia solo puede venir de Dios". (Previo paso por el cepillo y depositar los 25 millones de euros que llevan de perdidas)


Cañizares ha expresado que "la ciencia y la técnica no son suficientes" ante la pandemia y que hay que poner la confianza en Dios, según ha explicado el Arzobispado en un comunicado.


Para el arzobispo, "sólo la fuerza de Dios y de su amor, que apuesta por el hombre, es la que nos hará superar la pandemia", ha remarcado, antes de invitar a "fiarse totalmente de Dios, que no nos deja nunca en la estacada, y hacer lo que Él nos dice, como nos indica María".


A los que tenemos unos pocos años, las palabras del arzobispo de Valencia nos suenan a otra época, al franquismo con su prepotencia que nadie les podía contradecir. Venían haciendo lo mismo desde siempre, con más fuerza desde que la inquisición se hizo la juez de vidas y haciendas de todos los seres vivos.


"Todo es obra de Dios, y si Dios lo ha querido así, solo nos queda rezar y pedir que nos perdone". ¡Perdonarnos!  ¿de qué? De siempre me han acusado de ser un pecador por el mero hecho de nacer. ¡Manda huevos! Así que contra la pandemia que nos asola el remedio es la oración, pero con devoción, como decía mi amigo    Lorenzo de Toledo


Cañizares nos dice que tenemos  que rezar para que Dios nos proteja, eso hoy suena al fulano que está pasado de sustancias varias y que ha sido el método empleado con los analfabetos de hace muchos siglos. 


En otras ocasiones de pestes asesinas, los fieles se reunían en las iglesias a rezar todos juntos y, se contagiaban   los unos a los otros, caían como moscas, pero iban bien rezados y seguramente con las puertas abiertas al cielo. En cambio los que se iban al campo y no se contagiaban, el Decameron por ejemplo, no se morían ahora, pero cuando murieran iban al infierno de cabeza, seguro. Lo decían y lo dicen lo curas.

Cuando todos lo científicos del mundo se esfuerzan en encontrar una vacuna y un remedio para luchar contra el covid-19, el representante de la iglesia católica, arzobispo Cañizares, conocido ultra, nos viene a decir que la ciencia no vale nada contra los designios de Dios y que recemos para salir de ésta. Hace falta tener la cabeza hueca. ¡Pues es lo que hay! La ciencia nunca se ha llevado bien con los curas. Oigan, en estos curas se apoyan los fachas del PP de Pablo Casado, no digan que no se les ha advertido.

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