Es uno de los personajes más siniestros de nuestra historia política reciente, pero no renuncia a seguir avergonzándonos cada vez que tiene un micrófono delante. El nombre de José María Aznar ha quedado ligado para siempre a la guerra. En concreto a la invasión de Irak, con su apoyo servil a George Bush y sus trolas sobre las armas de destrucción masiva. Pero también a los embustes del 11M o a la ignominia del Yak-42.
Con un historial semejante, cualquiera estaría escondido avergonzado, pero él no tiene problemas en seguir saliendo cíclicamente a la palestra para pontificar sobre política internacional o para criticar a España.
En esta ocasión, el expresidente del Gobierno ha asegurado desde São Paulo (Brasil) que si "Israel no gana" en Oriente Medio, "la próxima batalla será en las costas del sur de Europa".
No hay una guerra perversa que no cuente con él para jalearla. Para hacerse a la idea de su radicalidad, en la charla también criticó a EEUU por tratar de disuadir a Israel en sus ofensivas militares. ¿Sabéis cuando dos se pegan y hay un grupo de gente alrededor animando y gritando: ¡pelea, pelea!? Aznar es como esos.
Sus palabras han tenido respuesta en las redes. Una de las frases más repetidas es: "El de las armas de destrucción masiva". Su atroz fama le precede.
Por recordar algunas de las últimas perversiones que nos ha traído Aznar, su famosa frase "el que pueda hacer que haga" sobre Pedro Sánchez, que en los últimos años y también en los últimos meses explica muchas cosas. Si es que hasta se le está poniendo cara de malo de película…
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