martes, 27 de marzo de 2018

CRISTINA CIFUENTES SE ESCONDE DETRAS DEL PLASMA AL ESTILO M. RAJOY

IGNACIO GONZALEZ EN LA CÁRCEL, CIFUENTES Y SU MÁSTER. VAYA PAREJA DE PRESIDENTES DE MADRID


El escándalo de Cifuentes y su "máster" perdido y no hallado se asemeja a una parodia de los Hermanos Marx. Estos se hacían pasar por unos reconocidos galenos para "sablear" a la dama ricachona.  Los médicos les piden una demostración y para hacer pasar el tiempo se lavan continuamente las manos con la exclamación "esterilización, esterilización", y así un no parar de "esterilización" una  y otra vez, el caso es no dar la cara.

Lo mismo está haciendo Cristina Cifuentes, en vez de sacar el máster y demostrar su inocencia se rodea de unos personajes, lo más parecido a unos trileros, por sus explicaciones, que avergüenzan a cualquiera.

No hay que haber ido a la Universidad para saber que las cosas no pueden ser como Cristina Cifuentes dice que han sido. Ningún Estado en el que sus universidades operaran de esa manera podría sobrevivir. De generalizarse lo ocurrido en el máster cursado por Cristina Cifuentes, todo el sistema educativo -no solamente el universitario- se vendría abajo y, en consecuencia, la sociedad española entraría en un proceso de descomposición imparable e irreversible. Las cosas no pueden ser así.
Lo más grave no ha sido lo que ha ocurrido y que ha sido descubierto por Raquel Ejerique, sino que, una vez descubierto, se están dando las explicaciones que se están dando, por Cristina Cifuentes, por el rector y por los profesores de la Rey Juan Carlos. Eso indica que la corrupción ha penetrado en dicha Universidad de manera alarmante.
La Universidad publica, como todos los organismos estatales, tienen un "registro" donde se anota el día y la hora de todos lo documentos que tienen entrada. Nada más fácil que ir al "registro y comprobarlo". A mayor abundamiento, en un máster la gente se conoce "de vista". Y en este nadie recuerda la presencia de Cifuentes. Blanco y en botella.
La Comunidad de Madrid desde el Tamayazo ha tenido a Esperanza Aguirre, las ranas de la corrupción la han ahogado. Nos dejó a Ignacio Gonzalez, que está en la cárcel. Con Granados y sus millones olvidados por los "altillos". Ahora la Cifuentes, mala de solemnidad como delegada del Gobierno ¡ Pero qué hemos hecho para merecer esto!.
El colmo del "espantajo" lo hace una colaboradora de Cifuentes cuando dice "está muy mala tiene que tomar Paracetamol de 1 gramo al día". Con esa "gravedad" le  tienen que administrar el viatico, que no pinta nada bueno.¡ Pero que panda de  mastuerzos rodean  a semejante personaje!.

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