EN LA CÁRCEL AÑO 1934 |
ENTRAN EN LA CÁRCEL AÑO 2018 |
La resolución del juez del Supremo, Llarena, por la que encarcela a la cúpula del llamado procés ha llenado de regocijo a muchos, periodistas, tertulianos y demás, que venían pidiendo "mano dura con los independentistas". A la mayoría de estos "salvapatrias" la unidad de la Nación España se la trae al fresco. Ellos van a su pesebre que les da de comer y disfrutar de buena vida y eso sólo se consigue siendo mamporreros de M. Rajoy y Soraya Saez de Santa Maria. Estos últimos, han estado cinco años sin mover una paja para acercar posiciones con los que entonces "sólo" querían una mejora económica al estilo Vasco o Navarro.
M. Rajoy ha llevado el partido al peor campo posible la judicializacíon, en este campo juega con ventaja. No me vengan con milongas de la separación de poderes, es falso. Los jueces del Supremo emanan del Consejo General del Poder Judicial y este a su vez es designado por la mayoría parlamentaria que es la del PP. ¿Queda claro quien nombra a la cúpula del Poder Judicial?. Pues eso.
Los responsables del procés han apostado por "no se atreverán". Que inocentes, tontos, han sido. Han puesto lemas de otras épocas "el mandato del pueblo hay que respetarlo". ¿Pero qué pueblo?, porque más del 50% no quería la separación. Pero ellos han interpretado a su manera los números y han tirado para adelante.
Es difícil hacer las cosas peor. Empecemos por el brujo de la tribu, Artur Mas. Pide y no le dan, se cabrea y dice a M. Rajoy, "te vas a enterar". Y empiezan con el España nos roba, y todas las mentiras siguientes, este ha sido el procés de las mentiras. Cuando todo había saltado por los aires el brujo Mas reconoce que de lo prometido no se pude cumplir nada. Y la proclamación de la República, mediante las trampas asquerosas del 6 y 7 de setiembre dura ocho segundos. No se ha podido hacer peor.
La actución brutal de la policía el 1-O puso en contra de M. Rajoy a muchos catalanes que hasta ese momento no tenían veleidades independentistas. Las elecciones anticipadas por aplicación del 155, fue un estado de excepción clarisimo. El resultado sólo sirvió para dejar las cosas iguales pero con un claro perdedor M. Rajoy y su PP .Eso no le importó. Puso en marcha el plan "meter en la cárcel a los autores del procés" .
Mientras entraban en la cárcel los llamados por el juez Llanera, primero los dejó libres con una fianza y luego los encarcela, los tertulianos de "la casa" se frotaba las manos y muy circunspectos decían "ya lo decía yo, terminan en la cárcel", y por lo bajinis remachaban "de donde no tiene que salir nunca". "¿Donde está la seguridad jurídica del justiciable"?. Ya veremos lo que dice el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo. Pero el daño ya está hecho.
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