GUANTANAMO EN MADRID II

Escribía Camilo José Cela, que la policía pegaba a golpe de pito. Si le dicen que pare de pegar se queda con la porra en el aire. Sin esclarecer que ha pasado en el CIE de Aluche en Madrid, sin esclarecer porque el Ministerio del Interior no ha permitido que nadie se entreviste con los amotinados, lo cual ya dice que algo no está todo lo claro que debiera estar. Yo me temo lo peor. La policía esta jerarquizada y cumple ordenes, está sujeta al imperio de la Ley y debe cumplir escrupulosamente los derechos de los ciudadanos.Si ha habido comisión de delito que se responsabilice el que sea. El que sea, repito. 

Me vienen a la memoria unos caso significativos: febrero de 2003, Gobierno de  Aznar, delegado del Gobierno en Madrid Francisco Javier Ansuátegui. Puerta del  Sol de Madrid, un comisario le abre la cabeza con su porra a una chica que protestaba por lo que le habían hecho a otro joven tirado en el suelo, el policía José Aquilino Pelaez ante la protesta de la joven en un rasgo que le define como un criminal se dirige a la joven y la golpea en la cabeza con su porra. Días más tarde ante las protestas generalizadas los sindicatos policiales gremiales salen en su defensa y dicen :que este sujeto José Aquilino Pelaez, Puma 50 "esta muy apenado". Nunca se hizo publico si semejante comportamiento criminal fue sancionado o reprochado. Este sujeto se jactaba "de que le dolía el hombro de los palos que había pegado". Era comisario, no un machaca cualquiera. Estos comportamientos eran perfectamente homologables  en el franquismo. ¿Dónde estába La Fiscalia?. Con Aznar. 

Pues algo parecido está pasando en el CIE de Aluche, se produce un motín por las condiciones de mala vida que soportan, negocian con la policía y se acaba el motín. Al día siguiente hay denuncias que la policía les ha dado una paliza, de ser cierto estaríamos ante un delito de torturas y malos tratos producidos por agentes de la autoridad. Algo muy grave.

¿Por qué no se ha permitido a los abogados y a las ONGS que los visitaran?. ¿Por qué el Ministerio del Interior con su Ministro en funciones a la cabeza, Fernandez Díaz, no ha abierto las puertas?. Algo huele a podrido en todo esto. Y si por un casual a algún policía se le ha soltado la porra motu proprio o por ordenes se deben depurar responsabilidades a todos los niveles.

En una entrevista en la SER, hace ya años, un mando de la policía dijo "y cuando llegan los Alazanes, nombre de una unidad de intervención, no se andan con contemplaciones". Al oir a semejante matón de taberna, pero con sueldo del Estado, se me levantó el estomago. Pero es que el periodista le rió la gracia. Jactarse de ser un delincuente amparado por el uniforme me parece nauseabundo. Con este "tipejo de Ministro" que lo llamó Azpeolaza  cualquier cosa es posible. Hasta fabricar pruebas falsas que las afine la Fiscalia. Como con el franquismo. Estos son los del Estado de Derecho. Estado de todos quietos.