martes, 7 de noviembre de 2023

LA GUERRA SUCIA DEL PP Y VOX CON EL PODER JUDICIAL Y EL JUEZ GARCÍA CASTELLÓN

 

JUEZ GARCÍA CASTELLÓN SIN DISIMULO

La justicia, un sector dominado por los conservadores, ha sido vista siempre por los socialistas como un elemento central de la oposición a Pedro Sánchez desde que llegó a La Moncloa. Hace cuatro años, en la anterior investidura, la Junta Electoral Central inhabilitó al entonces presidente catalán Quim Torra cuatro días antes de votar, y los socialistas inmediatamente lo atribuyeron a un movimiento para torpedear el pacto con ERC, que pese a todo consiguió resistir. Desde entonces, Sánchez ha tenido enfrente al Consejo General del Poder Judicial, con mandato caducado ...

NO GUARDAN NI LA NATURAL PRUDENCIA Y DECORO. SE POSICIONAN CONTRA SÁNCHEZ OLVIDANDO EL PRECEPTO MÁS ELEMENTAL :LA IMPARCIALIDAD. FEIJÓO SE AGARRA A LAS ALGARDAS DE VOX Y LUEGO SE DESMARCA COMO BUEN COBARDE QUE ES. NO HA OBTENIDO LA CONFIANZA DEL CONGRESO PERO ESO NO LE IMPORTA. EL Y SU CAMARILLA VAN, COMO DIJO MONTORO "QUE SE HUNDA ESPAÑA QUE YA LA LEVANTAREMOS NOSOTROS". ELLOS SON LOS MÁS CORRUPTOS. EL PP CORRUPTO DESDE SU ORIGEN CON EL FASCISTA DE FRAGA IRIBARNE

Desde que las urnas no les dieron la razón el 23J, los populares, que ya en poco o nada se distinguen de la ultraderecha de Vox, se han envuelto otra vez en la bandera de la incontinencia, el resentimiento y la frustración para soliviantar a las masas. Sin medida alguna de la crítica, con la excusa de una supuesta traición al Estado español y sin atisbo del más mínimo sentido de la responsabilidad institucional, el PP que hoy dirige el templado Feijóo ha vuelto a recuperar el argumento del España se rompe sobrecargado de histrionismo y desesperación al ver cómo se desvanece en el tiempo la posibilidad de una repetición electoral. 

No es la amnistía lo que les preocupa, sino que ellos, los de la Gürtel, la PúnicaLezo, la Operación Catalunya, la policía patriótica, los informes falsos contra los adversarios políticos, los sobresueldos, las mordidas y la corrupción generalizada, no van a recuperar en el horizonte inmediato el poder perdido, que es lo que antes del 23J daban por descontado.

La ex presidenta de la Comunidad de Madrid es hoy una anécdota en la política española, una ex que reparte lecciones de ética y moral por las televisiones amigas, pero es también el símbolo de lo que fueron y lo que son. Es una dosis de recuerdo de la peor derecha y es una acicate para defender eso que Sánchez llama el reencuentro. Al fin y a la postre ella fue una de las principales instigadoras de la recogida de firmas contra la reforma del Estatut de 2006 y las llamadas al boicot de los productos catalanes.

Aguirre, aunque no esté procesada, fue también la responsable de los múltiples casos de corrupción en los gobiernos que presidió entre 2003 y 2012 y la mayor beneficiada de aquellas tramas corruptas en sus campañas electorales, a las que acudió dopada de financiación ilegal. Es, en definitiva, el paradigma de la indignidad y el desprestigio. Pero ahí está, de agitadora de masas, de defensora de la pureza de la política y de plañidera de una supuesta España que se derrumba y un Estado de Derecho en demolición.

El problema del PP, y no solo de Aguirre, es que ya ha difuminado por completo la frontera que le separaba de la ultraderecha, es su permanente ejercicio de irresponsabilidad al convocar protestas en todas las ciudades de España el próximo domingo contra una ley que se aprobará legítimamente en el Parlamento y es también el recuerdo de los años de corrupción generalizada en la que sumió a esta España a la que tanto ama, pero para la que no desea una convivencia pacífica entre sus territorios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario