Hemos tenido mala suerte, en un momento critico, el proceso independentista catalán, tenemos los dos lideres mas catastróficos que podíamos tener. En Cataluña está Puigdemont con Artur Más, y en el Gobierno Central esta el INUTIL de Rajoy.
Empezó con los desprecios al "estatut" por parte del PP y sus secuaces. Todos nos acordamos del "no consuman productos catalanes". El "cepillado" de Alfonso Guerra al estatut. Los recursos al TC y así llegamos a Artur Mas pidiendo a Rajoy un Concierto Económico como el que tiene Navarra y Euskadi. Rajoy que le sale su mala leche de reprimido y le dice que "ves la puerta, pues ciérrala por fuera".
Artur Mas convoca elecciones y no gana como el quería. Tan mal le sale la cosa que las CUP le ponen la proa y le apartan, en su lugar ponen a Puigdemont, un desconocido a las ordenes de Mas.
En la Moncloa, Rajoy se pone chulo y dice que les manda a los jueces y fiscales y para que vean lo mucho que manda. El TC se pone en primera fila y aplica lo inaplicable.
Para remachar su "mando" manda a los antidisturbios", es que estos "fachas" solo saben pegar palos y tiras balas de goma. Por cierto, en Cataluña están prohibidas. También se salen del Estado de Derecho los policías y sus mandos que no respetan los derechos individuales.
Ahora los unos se tiran los trastos a los otros. No se puede insultar a un pueblo, no se puede emplear el termino radical para los otros, y callar que abuelos han sido heridos cuando pretendían votar y el ministro del Interior, Zoido,(peor que su predecesor) calla que han sido heridos por la desmesura de sus policías, convenientemente cabreados metiendolos en camarotes modelo zulo. A los abuelos lo llama radicales, -como en tiempos del Franco-.
Otro indeseable es el delegado del Gobierno en Cataluña. Miente más que habla.
Y con estos mimbres se ha hecho el cesto.
Sería mucho pedir, que dignamente se cortaran las venas. TODOS
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