EL CAOS EN LA ESTACIÓN DE CHAMARTÍN DE RENFE ES UNA CONSTANTE INSUFRIBLE.
Cuando no es la caida de una catenaria es por otra cosa, la cuestión es que la estación de Renfe de Chamartín es una pesadilla.
El pasado 29 de julio regresaba de mis vacaciones de Benicarló, tenía solicitado el servicio Atendo, para persona discapcitada que necesitaba silla de ruedas. Llegamos a la estación y nadie sube a por la maleta, pasa el tiempo y nadie aparece, mi esposa tambien discapacitada y de avanzada edad agarra la maleta para bajarla, ante mis gritos para que no lo hiciera un joven la ayuda a bajarla, pide ayuda a un chaleco naranja y me ayudan a bajar. La silla de ruedas estaba alli pero no la persona indicada. Aparece el responsable de la silla de ruedas me ayuda a sentarme y me dice "espere que voy a por otra persona". Eran las tres de tarde y la temperatura del aire superior en mucho a los 38 grados. Así estamos cuando aparece la persona con el carro para llevar las maletas. Las monta y se marcha. Nosotros llegamos como podemos a la entrada al ascensor y empieza la odisea sugunda. El ascensor lo sobrecargan y no abre las puertas al llegar arriba. Empieza un "a ver que hacemos" entre los chalecos naranja, y tras más de media de hora de espera a 40 grados, baja el ascensor y abre sus puertas, mi maleta ya la doy por desaparecida. Llegamos arriba y mi portador hace malabarismos para pasar entre la masa de personas. Llegamos donde estaba la transportista de las maletas que la vas dejando sin preguntar por el dueño, con claro riesgo de robo de la maleta, como puedo llego con la silla de ruedas a mi maleta y ya no me separo de ella.
Yo tenía pedido ser acercado a la parada de taxi, mi porteador muy amable me conduce a la parada de taxi de un hotel previa llamada particular a Teletaxi. Llega el taxi y nos dirigimos al domicilio. Por fin llegamos. Nos ha costada salir de la estación una hora. Un desastre por falta de previsión y falta de personal de Renfe.
En el viaje de ida Benicarló el día 9 de julio, en Chamartín todo funcionó correctamente. Al llegar a Benicarló la persona de Atendo confesó no haber visto mi servicio y no me prestó ayuda, a la vuelta el día 29 no se presentó y dejó solo a su compañero y mi me ayudo la jefa de la estación.
El servico Atendo en Renfe es primordial para personas discapacitadas, hay abuso descarado como el que queria que le llevaran la sombrilla en silla de ruedas, el personal soporta un estres imposible.
Nota. Los diás de más servicios se debe reforzar el personal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario