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| ARRIMADAS NO TIENE SENTIDO DEL RIDÍCULO |
Arrimadas, que se ha venido a Madrid porque en Cataluña ha perdido hasta la dignidad, se soltó el pelo en La Sexta y dijo más mentiras que palabras. Es indignante como estos políticos mienten con ese descaro ante la audiencia. ¡Que no somos idiotas! Solté ante tanta mentira. Cambie de canal y me olvidé de la mentirosa de Arrimadas.
Albert Rivera juró por la salvación de su alma que no apoyaría a M. Rajoy. Firmó lo que le pusieron delante, qué luego el PP se lo pasó por el forro de sus caprichos y, estuvo de "palanganero" con el Gobierno de M. Rajoy. Rivera ya sabía de las golfadas del PP. Lo sabíamos todos, pero el se lo tragó todo con tal de la foto del besamanos. Se creyó lo de la encuesta fantasma que le daba como presidente del Gobierno. Y se lo creyó de verdad. Traicionó a M. Rajoy y se puso en la linea de salida convencido que iba a pasar al PP. Lo ha pasado, pero por la derecha, no en escaños, que son los que valen.
Arrimadas ha llegado a Madrid con los mismos modos y maneras de los que hacia gala en Cataluña, pero aquí es una fuerza residual que necesita del PP y de VOX para salir en la foto. Cuando a Rivera le decían que era Primo de Rivera era por algo. Ya demostraron que no eran de fiar pactando con el PSOE y luego con el PP y VOX en Andalucía. Dicen y, se lo creen ellos solos, que no se sientan con VOX, pues pactaran de pie, pero pactan, valla que si pactan.
El chalaneo que hay que ver entre los grupos políticos es como una feria de ganado. En las ferias todo se vende y todo se compra. Hay que ser más listo que el otro para venderle la burra coja como buena. En las ferias las transacciones se sellan con un apretón de manos. Entre políticos se firman muchos documentos y luego no se respeta ninguno. A estos políticos en una feria los corrían a garrotazos.
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