Una circunstancia "aterradora" ha sido la respuesta del conseller de Interior, Joaquin Forn, sobre cuantas eran las victimas. El conseller repetía que era una victima mortal y al tiempo todas las informaciones daban "13 victimas mortales". Esto es incomprensible en quien tiene la responsabilidad de las Fuerzas de Seguridad de Cataluña. Al poco tiempo se confirmó que eran 13 las victimas mortales.
Una de dos o el conseller Joaquin Forn no se había enterado de nada, lo cual es muy grave, o es un "inútil absoluto". Me inclino por las dos apuestas. Los Mossos de Escuadra de Cataluña arrastran una "demasiado larga historia de abusos policiales, malos tratos y brutalidad policial", pero no eficacia. Tanto que han tenido que ser "indultados" varios Mossos después de ser condenados en firme por torturas. Hay pendientes juicios en los que se les acusa de homicidio. Su responsable se preocupa más por el "corporativismo" que por la buena organización. Mal asunto.
Para rematar la faena y abundar más en mi opinión que el conseller Joaquin Forn es un "inutil", hace distinción entre victimas "catalanas y victimas españolas". Ya se sabe, cuando el gilipollas mira al dedo que señala la luna, solo ve el dedo. Y esto es lo que le ha pasado al conseller Joaquin Forn, que además de no hacer caso a las advertencias de "otros", se ha quedado mirando "su" dedo y no ha visto lo demás. La falta de seguridad, así como la ausencia de Policias en zonas tan concurridas han propiciado que el asesino se marchará después de cometer el brutal atentado. Inaudito con la experiencia que tenemos en España. Pero, a lo que se ve, la experiencia en España no sirve en Cataluña.
Los terroristas son los únicos culpables, ya lo sabemos, pero a los responsable de la seguridad hay que pedirles, exigirles mejor, capacidad y saber hacer su trabajo. Los gobiernos de fieles se suelen llenar de inútiles babosos.
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