¡Ya ha costado!, pero Felipe VI lo ha dicho, la etapa del franquismo era una "dictadura". Y en esa "dictadura" se designó a su padre Don Juan Carlos de Borbón y Borbón "sucesor" del dictador a titulo de Rey. No hubo una restauración de la monarquía de Alfonso XIII, hubo una "instauración" de una monarquía nacida del espíritu del 18 de julio,la sublevación militar contra el gobierno legitimo de la República.
Y con estos mimbres se ha hecho el cesto. El cesto de una monarquía que no tuvo lo que hay que tener para preguntarle al pueblo soberano "¿si después de la dictadura queríamos una monarquía o una república"? Y no lo preguntaron porque la respuesta era "¡queremos una República!.
Los cuarenta años que han pasado desde las primeras elecciones después de la dictadura han tenido muchas caras. Desapareció la UCD después de ser Gobierno y ahora ya nadie se acuerda de nadie de los que dieron los primeros pasos en la transición. Apareció el PSOE con mayoría absoluta, 202 diputados y fue sumando Comunidades y Ayuntamientos a su cuenta de poder absoluto, ya se ocupó de sumarse al Poder Judicial para que no quedara ningún cabo suelto. Desde el primer día de mandato del PSOE se empeñó en hacer desaparecer al partido líder de la lucha contra la dictadura, el PCE. Y bien que lo consiguió. Se abrieron todas las carteras para llevar a sus filas a los punteros del PCE. No hubo una sola referencia a las victimas del franquismo (lo ha dicho Odon Elorza, diputado del PSOE "quizá no nos ocupamos lo debido de las victimas del franquismo"). El PSOE se enfangó en la corrupción y terminó perdiendo el gobierno en 1996. Llegó Aznar, y por aquello de "París bien vale una misa", se apoyó en Vascos (llamó a ETA "movimiento vasco de liberación") y en catalanes (pasó del "Pujol, enano habla castellano", al "yo hablo catalán en la intimidad". No sería con la Botella, Ana).
Terminó su segundo mandato de una forma miserable. Engañando a los españoles sobre la autoría de los responsables del 11-M. No admitió nunca su responsabilidad por la presencia de España en la guerra de Irak.
Volvió el PSOE de Zapatero, y aparte de la Ley de Memoria Histórica no dio muchas a derechas.
Ha vuelto el PP de la corrupción con Rajoy el mentiroso. En medio, el pueblo que no sabe como llegar a fin de mes.
Eso sí, el Rey Felipe VI llama dictadura al franquismo. Mientras Leticia Ortiz Rocasolano, la Reina consorte, mantiene un rictus hierático que impresiona a los diputados. Ya se sabe, los que son de "buena cuna" estas cosas les aburren.
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